Universable
¿Es posible cambiar nuestra forma de relacionarnos?
¿Podemos exigir la transformación de las prácticas sociales?
Desde los derechos humanos la libertad implica saber elegir actuar para respetar la igual dignidad y derechos de todas las personas. Se plantea en esa dirección pues pasa por comprender que la discriminación y la violencia afecta no sólo la dignidad de las otras personas, sino en primer lugar la propia dignidad. Es decir, la libertad desde los derechos humanos es relativa a consolidar una sociedad igualitaria.
Desde 1948 en que se plasmó como un deber de todos los Estados erradicar toda forma de discriminación, el derecho ha logrado una profunda transformación en la que no sólo se definen nuevas conductas prohibidas, se establecen obligaciones y autoridades que las deben cumplir, también mecanismos para exigir su operación desde la ciudadanía. Sin embargo, la mayoría de las personas no las conocen y las percepciones y prácticas sociales siguen siendo discriminatorias.
Sofía Echeverrí es una mujer libre que ante las interpretaciones patriarcales de nuestro pasado por parte de la arqueología, reflexiona y elige reinterpretar el arte prehispánico dando un lugar de igualdad y potencia para las mujeres. No se trata de exactitud, de tener título de arqueóloga, se trata de reparar daños con la potencia de la imaginación, de ensanchar puertas para salir de la inercia de asumir lo dado como única opcion.
Como persona digna, Sofía Echeverri nos comparte que es posible representar la reproducción de nuestras tradiciones como hombres y mujeres en igualdad, que sí es posible representar lo fantástico y lo increíble indistintamente. Cada uno y cada una es universable. Su trabajo concreta el deseo de muchas de estar libres de esterotipos discriminatorios.
Por otro lado, en “Algunos nos han dado la espalda” nos recuerda que sí hay quienes se benefician de la desigualdad, pero que no son todos, y que el reto de transformarnos y de consolidar la libertad en las relaciones sociales requiere de desmontar privlegios, no sólo discriminciones.
En un contexto de incremento de la violencia extrema por el deseo de no perder los poderes de dominio y privilegios; en un momento donde es nuestra vida y nuestra integridad donde lo sufrimos y desde donde nos rebelamos, la obra de Sofía Echeverri nos recuerda que cada uno y cada una es universable y libre de abonar para la igualdad sembrada desde hace siglos.