Sofía Echeverri | Amorfo Mal
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Amorfo Mal

de la serie células

Sospechosavisión / falsaceguera es, en algunas de sus series, un encuentro íntimo con los recuerdos primeros y de lo que ha llegado de ellos al presente tras cruzar el implacable tamiz deformador de los años.

 

Este cruce, desde las primeras remembranzas, es también una dura navegación contra corriente de los millones de estímulos a los que nos exponemos diariamente y que a la vuelta del tiempo nos descubre descarnadamente como seres desempoderados dentro de una sociedad mediáticamente manipulable. Sólo nos quedan aquellas imágenes de infancia, parecería decirnos Echeverri, de las que podemos sujetarnos de manera confiable, seguros de que si son ellas lo último que queda en nuestras manos, podemos partir con un salvoconducto confiable hacia otro espacio donde se reivindiquen las imágenes primeras de nuestra existencia.

 

Entre las series más poderosas de la producción de Sofía Echeverri, están las que se relacionan con las Células, pletóricas de color y malignidad y con lo que ella llama el Amorfo mal, serie de letreros con frases de pensamientos, ha dicho ella misma, que denotan sentimientos de hipocresía y deseos de poder de una manera discreta, casi oculta, en medio de una mancha sin forma definida.

 

Este trabajo, cuidadosamente hecho para que parezca un organismo que es capaz de albergar en sus profundidades a las palabras, delata algunos de los momentos más incómodos de su producción, de apariencia engañosamente sencilla, y nos pone delante textos que se leen a partir de que ella ha borrado las líneas del dibujo y “entresacado” las palabras de aquello que se ha omitido. Amorfo Mal, pone ante nuestros ojos obras como Vengar cautivando.

 

Por si quedase duda, ella misma lo ha dicho: “El absurdo, el vacío, la vulnerabilidad, son temas que permean estas piezas que toman forma humana y en ocasiones animal. Mediante las imágenes de infancia nos reconocemos frágiles y, paradójicamente, poco concientes de la muerte.”

— santiago espinoza de los monteros